Vuelta a la rutina mental

1/13/2009

Me ha costado una semana adaptarme de nuevo a la vida laboral/estudiantil, vale, pero al fin la maquinaria está de nuevo preparada. Tengo mi apuntes colocados sobre la mesa de estudio, mi planning de exámenes en el iCal, la agenda con todo el trabajo desglosado y he vuelto a pisar la facultad. Puedo decir, por tanto, que los logros alcanzados en 2008 no fueron un espejismo. Me enfrento a la prueba de fuego, prepararme los exámenes, y creo que esta vez no dejaré que me gane la apatía, la desconfianza en mí misma ni la desgana. Me apetece preparármelos bien, la mayoría son asignaturas que me gustan y la mayoría de profesores me motivan...

¿He dicho la mayoría? Quería decir todos menos una. Y es que si hay algo que no soporto es que las personas no sean coherentes, que donde dicen digo ahora digan Diego. Ese ha sido el caso de la profesora de Periodismo Especializado. A principio de curso me quedé en su primera clase pensando que me había matriculado en ese grupo y me llamaron mucho la atención las cosas que decía que íbamos a hacer en la clase, el método de evaluación, cómo se expresaba ella, su curriculum, el trabajo práctico que nos propuso... Pero, además, me gustó que fuera a adelantar el examen parcial a Diciembre a quienes asistieran a los debates de los temas teóricos. Dijo también que ese examen sería sin teoría, que la daría pos sabida con esos debates.

Nada mas salir de la clase me di cuenta de que estaba matriculada en otro grupo y me fastidió mucho. Quería hacer el trabajo práctico con ella porque era un monográfico y nunca he hecho uno entero. Me hacía ilusión aprender a hacer un perfil porque tampoco era algo que supiera cómo hacer. Así que removí cielo y tierra para cambiarme de grupo hasta que lo conseguí. Para entonces habían hecho ya algunas actividades en clase, en plan "decidme cuántas páginas trae El País hoy" o un test de actualidad... Cosas que yo no tuve opción a hacer porque dejó muy claro que no quería en la clase a nadie no matriculado en su grupo.

Pues nada, me matriculo y llego a tiempo para asistir al debate del primer tema. Ahí va Marta ilusionada porque el periodismo especializado le gusta y quiere aprender de esa mujer... La decepción fue, ¿cómo calificarla? estruendosa. La profesora dijo que antes del debate había un turno de dudas y la gente comenzó a preguntar cosas de perogrullo llegando incluso a formular varias veces seguidas la misma pregunta de distintas maneras. Ella se limitaba a contestar aunque me niego a pensar que no se daba cuenta de lo que estaba pasando. Así transcurrió toda la clase, de debate nada de nada. Salí con la sensación de que los "debates" teóricos iban a ser un puro trámite.

No me equivocaba, lo miso pasó en toooodos los debates. Se pasaba una hoja de firmas y ¡ala!, el tema superado... O eso creíamos. Ya entrados en Diciembre dice la profesora que va a sacar la lista de quienes tienen derecho a hacer el examen sin teoría adelantado. Advierte que quien no haya hecho la mitad más una de las prácticas no estará en esa lista. Ahí me mosqueo y cuento, "mmm, si la mitad de las prácticas las han hecho sin estar yo matriculada y llama prácticas a los ejercicios hechos en clase... va a ser que no tengo opción por mucho que haga cuentas". Voy a su despacho y le comento mi situación: Me falta una práctica para llegar a la mitad de las totales que es, precisamente, la qe se había entregado dos días antes y que no entregué por estar en cama con fiebre y baja médica. De hecho mis compañeros de grupo son testigos de lo mal que estuve.

Pues bien, la señora me espeta que si no he estado matriculada antes, ese no es su problema. Que hubiera puesto interés en hacer todas las prácticas restantes. Le digo que vale, que le entrego la última práctica y me responde que no puede hacer excepciones. Le contesto que eso no es lo que dijo a primeros de curso, que dijo que quien asistiera a los debates le quitaría la teoría y me dice que ha cambiado de opinión porque mucha gente venía solo a los debates y que ella solo examinaría antes a los alumnos que conocía.

Eso ya me tocó el alma porque a mí me conocía de sobra. Me siento delante del todo en sus clases y soy de las que participa con mayor frecuencia. Le he consultado cosas varias veces tras la clase, ¿y me va a decir que no me conoce?

Cuando le insistí en que el primer día de clase dejó claro que quien fuera a los debates no se examinaría de teoría me contesta que es un lio pasarle al profesor que la va a sustituir una lista con los que hemos ido a los debates pero hacemos el examen en febrero. Y es eso lo que me indigna, no puede decir una cosa a primeros de curso y luego cambiarla porque "ha cambiado de opinión". Si hay gente que iba solo a los debates es porque eran un cachondeo. Lo mas triste para mí no es solo que no he aprendido NADA de alguien que a priori me parecía una gran profesional, sino que lo único que he sacado en claro es que hay quien cree que por tener una posición de poder puede jugar con el tiempo de los demás siendo hasta tal punto incoherente. ¡Si lo llega a avisar antes no voy a los debates paripé o hubiera quedado con algún compañero en que me entregara la última dichosa práctica!

En fin, lo que no voy a hacer es dejar que sinsabores como éste empañen lo feliz que me está haciendo este cuarto de carrera y lo mucho que estoy aprendiendo de la mayoría de profesores, ya sea por sus clases, por los trabajos que proponen o por las puertas que creíamos cerradas y nos han abierto.

¡Feliz Martes!


Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

4 comentarios:

Dafne Laurel dijo...

buf... de verdad estas aprendiendo mucho en 4º??

Marta G. Navarro dijo...

En RRII por ejemplo si, y en plan autodidacta haciendo cosas para los trabajos de cibernético también. ¡Hasta del Galiana se aprenden muchas cosas sobre la vida! jajajaja. Pero lo que mola es que ya son asignaturas propias de la carrera.

Tillocai dijo...

A eso le llamo yo "tener profesionalidad" se como te sientes marta, yo tengo un profesor que es más o menos lo mismo, cada semana cambia los criterios de evaluación. Para que al final de curso me diga que con entregarle un trabajito sobre cual ya estás aprobado, y luego ver que tienes la misma nota tu que has trabajado cual jamelgo que uno que no ha aparecido por clase siquiera, triste muy triste

Alberto Zeal dijo...

Ainssss, el maravilloso mundo de la facultad de periodismo... Qué gran alegría no estar ahí dentro ya XD Siento decirlo, pero es que esa facultad logró que aborreciera los estudios universitarios, y todo por culpa de esa clase de profesores, q ningunean la libertad de cátedra como les sale de... de bueno, de la zona del bajo vientre XD

¡Suerte para los exámenes! ^_^

Publicar un comentario

 

También en...