Reyes + Coca Cola

Los primeros días se agolpan en el calendario, deseando salir. Y nosotros nos empeñamos en vivir el nuevo año segundo a segundo... A la semana vivimos minuto a minuto y, bueno, al mes volvemos a vivir día a día o de sueldo en sueldo. No obstante, de todo eso siempre queda algo y es lo bien que te lo pasas viviendo al día la primera semana ¿por qué narices no vivimos el resto del año igual?

El caso es que no he parado, así que perdón por no haber actualizado antes... Los días del 2 al 5 los empleé íntegros en comprar los regalos de reyes. Y ha sido un año récord porque no he tenido que descambiar ni uno. Así que llegué a la noche de la Cabalgata con los deberes hechos. Ya es tradición que vayamos esa noche a ver a sus Majestades con mis cuñados, y esta vez fue una contrarreloj. Yo salía de trabajar a las 22 horas, me estaban esperando con el coche en la puerta y volamos literalmente hasta la Buhaira que es donde se recogían. No vimos a Melchor, pero si la mayoría de carrozas. Mención especial para la de la "Estrella" y la de Don Quijote, con sendas muchachas que tiraban prácticamente bolsas enteras de caramelos. La decepción fue no ver a Platero, se conoce que para entonces el asno estaba cansado de ver a tantos humanos hacer el ídem. La sorpresa vino al final, porque hubo unos 10 minutos o más de fuegos artificiales, eran monísimos pero de tan cerca hacen muchísimo ruido y yo me tapaba los oídos permanentemente... Total, que he descubierto que no puedo ser corresponsal de guerra.

A la mañana siguiente, como es tradición, nos levantamos a las 7.30 de la mañana, aunque el día antes la juerga terminó a las 4 AM nada más y nada menos. Para colmo, mi querido Oni se tragó entero el partido de los Menphis para ponerme los regalos, los globos y las chuches mientras estaba dormida. Le quedó monísimo.


Y este es el aspecto que tenía el árbol al final del día (faltan algunos regalos, como mi DVD Edición coleccionista de Volver, las botellas de Cardhu y algo más, y un pijama de Snoopy... pero weno)




Esta semana estoy de vacaciones y tampoco paro. He empezado las clases y con ellas me he reencontrado con mi dificultad para madrugar (¿algún consejo al respecto?). Además, los amigos vuelven de las vacaciones y es alegre reencontrarte con ellos. Amanda me hizo una visita sorpresa el lunes y pasamos toda la tarde decorando mi piso virtualmente. Y nos costó poco porque casi siempre estamos de acuerdo en ese tipo de cosas y a ella se le da muy bien el estilismo, sabe lo que quiere con solo hablar un rato contigo. Es increíble. Ayer estuve hablando con Laffer (recomiendo encarecidamente su blog, lo teneis en los enlaces) al que tampoco veía desde hace mil y con el que me apetece mucho quedar en estos días, seguramente lo hagamos. Mañana y pasado, como hoy, apenas pasaré por casa y lo más curioso es que físicamente estoy pachucha, pero es cuando más ánimo tengo para quedar con la gente.

Hablando de la gente, ¿os ha pasado alguna vez que un/a amigo/a del alma, de esos que crees que siempre estarán ahí aunque todo el mundo se vaya, os da una puñalada enorme y para colmo trata de convencer a terceras personas de que el malo eres tú? A mi tampoco, sólo era curiosidad. Ese tipo de gente os dirá "te vas a quedar solo" porque realmente ellos lo están o se sienten así... o no se atreverá siquiera a decirte nada a la cara. Si conoceis a alguien así, por favor, salid corriendo hasta que no le veais ni de lejos. Vaya para ese tipo de personas, gracias a Dios que en mi vida no hay nadie así, el videoclip del día.