Fin de semana con altibajos. El sábado me levanté más tarde de lo que esperaba, llevo toda la semana durmiendo fatal y poquísimo a causa de los exámenes. Así que mi genial plan de "sábado toda la mañana estudiando en una cafetería frente a un muffin y un frapuccino" se fue al garete. No obstante fue una mañana de lluvia preciosa, con esa lluvia contundente y cerrada que te hace sentir limpio y purificado.
Nada más levantarme me pasé por la farmacia y, lo que es la vida, cerré un ciclo vital, una herida abierta hace unos 8 años. Resulta que en esa farmacia trabaja mi "mejor amiga" de la adolescencia. Esa chica a la que llamaba y me llamaba "alma gemela" y con la que hacía absurdas promesas de amistad eterna. Un día comenzó a alejarse de mí sin darme nunca una explicación (y eso que yo se la pedí) hasta que salió de mi vida. Y allí estaba, me saludó como si hubieran pasado unos días. Yo respondí del mismo modo. Me preguntó por mi vida y yo le dije que la veía muy bien en aquel lugar. Me dió mis medicinas y nos despedimos, por primera vez.
Después de eso fui con Oni-kun a hacer la compra de supermercado. ¡Es tan divertido! Sobretodo cuando las reponedoras te miran con cara de odio como pensando "Dios, sois empalagosos, me va a dar una subida de azúcar". Nosotros nos limitábamos a hacer el ganso mirando productos raros o analizando la compra de los demás, como lo hacemos siempre que vamos al super, pero a esa chica parce que le molestó.
Comimos pizza casera y tras eso tocaba limpieza general. ¡Ay! Como odio el quitagrasas que no me quita las mías. Me tiré hasta más de las 8 de la tarde con la mopa, los trapos y la fregona. Prácticamente hasta que llegaron Inma y Diana. ¡Qué ganas tenía de ver a mis niñas! Estuvimos viendo El sueño de mi vida, una especie de Big pero en femenino, y después La Mosca (¡qué grima!) mientras comíamos, otra vez, pizza. Llegó Amanda, como siempre, como un torbellino. ¡Es genial! El caso es que pasamos un rato agradable hasta entrada la madrugada. Esta mañana se tenían que ir, y yo tenía que estudiar porque como se puede deducir el sábado estudié poquísimo, solo un rato antes de ir a comprar.
Pero hoy me he vuelto a levantar tarde, me he pegado una siesta increíble y me he puesto finalmente a estudiar a las 8 PM. El caso es que me siento fatal, como si hubiera desperdiciado el día entero. Vale, he descansado, he charlado con Oni-kun horas... Pero no he cumplido mis objetivos. A partir de mañana tengo que compensar este tropiezo, amigos, ¿seré capaz?
¿Desea saber más?
http://willpower.co.uk/
Nada más levantarme me pasé por la farmacia y, lo que es la vida, cerré un ciclo vital, una herida abierta hace unos 8 años. Resulta que en esa farmacia trabaja mi "mejor amiga" de la adolescencia. Esa chica a la que llamaba y me llamaba "alma gemela" y con la que hacía absurdas promesas de amistad eterna. Un día comenzó a alejarse de mí sin darme nunca una explicación (y eso que yo se la pedí) hasta que salió de mi vida. Y allí estaba, me saludó como si hubieran pasado unos días. Yo respondí del mismo modo. Me preguntó por mi vida y yo le dije que la veía muy bien en aquel lugar. Me dió mis medicinas y nos despedimos, por primera vez.
Después de eso fui con Oni-kun a hacer la compra de supermercado. ¡Es tan divertido! Sobretodo cuando las reponedoras te miran con cara de odio como pensando "Dios, sois empalagosos, me va a dar una subida de azúcar". Nosotros nos limitábamos a hacer el ganso mirando productos raros o analizando la compra de los demás, como lo hacemos siempre que vamos al super, pero a esa chica parce que le molestó.
Comimos pizza casera y tras eso tocaba limpieza general. ¡Ay! Como odio el quitagrasas que no me quita las mías. Me tiré hasta más de las 8 de la tarde con la mopa, los trapos y la fregona. Prácticamente hasta que llegaron Inma y Diana. ¡Qué ganas tenía de ver a mis niñas! Estuvimos viendo El sueño de mi vida, una especie de Big pero en femenino, y después La Mosca (¡qué grima!) mientras comíamos, otra vez, pizza. Llegó Amanda, como siempre, como un torbellino. ¡Es genial! El caso es que pasamos un rato agradable hasta entrada la madrugada. Esta mañana se tenían que ir, y yo tenía que estudiar porque como se puede deducir el sábado estudié poquísimo, solo un rato antes de ir a comprar.
Pero hoy me he vuelto a levantar tarde, me he pegado una siesta increíble y me he puesto finalmente a estudiar a las 8 PM. El caso es que me siento fatal, como si hubiera desperdiciado el día entero. Vale, he descansado, he charlado con Oni-kun horas... Pero no he cumplido mis objetivos. A partir de mañana tengo que compensar este tropiezo, amigos, ¿seré capaz?
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